Te digo adios, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adios.
no sé si me quisiste... no sé si te quería...
o tal vez nos quisimos demasiado los dos.
Este cariño triste, apasionado y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
no sé si te amé mucho... no sé si te amé poco.
Pero sí sé que nunca volveré a amar así.
Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazon me dice que no te olvidaré
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.
Te digo adios, y acaso con esta despedida
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adios para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.